El pasado puente, asistí a una exposición en mi propia ciudad, Molina de Segura (Murcia). Fui a la antigua cárcel, que ahora es una sala de exposiciones, con mis padres. La exposición era de un grupo de artistas de mi ciudad de diferentes estilos y edades. La sala es la que se exponía es bastante pequeña y debido ha que había cuadros de gran formato, se aprovechó cada espacio en las viejas paredes de ladrillo.Los cuadros estaban colgados directamente sobre la pared (algunos sobre caballetes) e iluminados todos cenitalmente. Las obras se dividían por autor sin cartelas relacionadas, solo un número. En varias mesas había unas hojas con todos los números, el autor de la obra y el precio de la misma, o si pertenecía a una colección privada. Me gustó muco la exposición porque el factor común de todos los artistas que en ella expusieron es que aunque cada no tenga su propio estilo, todos pertenecen al taller de Ángeles Cerezo y yo estuve yendo a él durante algunos años en mi infancia. Recuerdo esa etapa con mucho cariño por la creatividad y la libertad que en ese momento probablemente no apreciara, pero que me ayudó a explotar una parte artistas que hoy día tengo bastante oxidada. Alguno de mis compañeros de entonces participaron en esta exposición y descubrí otros nuevos que también me gustaron mucho: Aurora Adán, Maite Amez, Ángeles Cerezo, Maribel Cerezo, Mª Ángeles Hernandez, Pedro Larrosa, Antonio López, Conchi López, Víctor Marco, Maite Prieto, Antonio Sánchez, Ángeles Sánchez-Pedreño, Pepa Sanz, Lolín Tortajada, Lola Vitoria, Ana Zapata. Os dejo el folleto de la exposición en el que aparecen todos ellos.
Os dejo un link de la página de Ángeles Cerezo, tiene obras maravillosas, yo me quedo con estas.
La primera porque es un retrato de las tradiciones murcianas. La segunda por los reflejos de los colores del atardecer. Y la tercera, por contraposición a la segunda, la claridad de colores y su gran luminosidad.
Fue un lujo de exposición.
Saludos desde el Poli Norte.
Quisquilla Graciosilla.
No lo dudo. Lo cierto es que es fantástico que se celebren este tipo de exposiciones con frecuencia y en todos los lugares. Está bien eso de una cárcel transformada en un sitio para el arte. Muy bien.
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